La Profunda Oscuridad Análisis - El DLC de Destiny se queda corto
El primer DLC de Destiny ya está aquí, ¿merece la pena pagar por lo que ofrece La Profunda Oscuridad, o The Dark Below si no lo traducimos? Pues no, la verdad es que no. Este es nuestro análisis.
Destiny ha sido uno de los juegos más importantes de 2014, no hay lugar a dudas, como tampoco las hay cuando decimos que también ha sido uno de los más polémicos: ha dividido a usuarios y críticas y muchos esperábamos que fuera algo más completo y variado de lo que realmente terminó siendo.
Sea como fuere, el juego de Bungie y Activision sigue adelante y ha recibido su primer DLC, denominado La Profunda Oscuridad, o The Dark Below si lo preferís en versión original, es exactamente lo que cabría esperar de él: adictivo por momentos, repetitivo y sin el contenido que se esperaba de él.
La Profunda Oscuridad es más bien superficial
La Profunda Oscuridad, para muchos jugadores, iba a ser la expansión perfecta para Destiny porque iba a combatir los dos grandes problemas que todos hemos visto en el juego: su falta de contenido y la cantidad de veces que hay que repetir cada pequeña misión para subir de nivel o conseguir materiales.
En lugar de ello, ‘profundiza’ aún más en estos problemas y no solo no aporta mucho que hace ni demasiados nuevos lugares donde jugar sino que insiste todavía más en que repitas las misiones y los objetivos para conseguir unas pocas armas y armaduras nuevas.
La Profunda Oscuridad tampoco se esfuerza por abrazar la estructura de pseudo-MMO de Destiny, pues seguimos recorriendo lugares yermos con compañeros que poco aportan, con los que la comunicación es muy limitada y que desaparecen, por la estructura del juego, cuando más se los necesita y las cosas se ponen crudas.
Vuelta la burra al trigo
La primera expansión de Destiny contiene tres nuevas misiones con historia, un nuevo asalto (que son dos si juegas en PS4), una nueva raid y tres nuevos mapas para el PvP, así como nuevas armas y armaduras para conseguir tras días de repetir misiones y conseguir materiales.
En resumen: no lo suficiente, y más de uno pensará que por su precio (19,99€ suelta, 34,99€ dentro del pase de temporda que incluye la siguiente expansión), es directamente una estafa. No vamos a criticar La Profunda Oscuridad por su precio porque es un error hacerlo en general, pero cabe mencionarlo.
La parte de historia de La Profunda Oscuridad se centra en Eris, un interesante personaje que aparec en la Torrre y que está aterrorizada por la Colmena y Crota, su líder; y la verdad es que sus misiones tienen algo de interés en sí mismas, sobre todo porque heredan parte de lo mejor de la primera Raid de Destiny.
Así, por ejemplo, en una misión veremos cómo nuestras habilidades son mermadas por el poder de Crota, lo que nos empuja a jugar de otro modo, y eso es divertido, pero solo ocurre una vez. Las otras dos misiones siguen siendo un amalgama de shooter fluido y de los enemigos de siempre – ni uno nuevo, no.
Ni parece oro ni reluce ni nada de nada
Las tres misiones pueden acabarse en una hora y no hay forma de repetir la primera de ellas, de modo que, al final, las tres misiones de La Profunda Oscuridad se quedan en dos, de ahí la furia desatada por muchos jugadores a los que no les convence que la expansión, al final, sirva para añadira una nueva raid y alcanzar el nivel 32.
Por lo demás, el PvP se mantiene igual, solo que añade los nuevos tres mapas, que están a la altura de los anteriores y que ofrecen entretenimiento suficiente para cuando te cansas de repetir las mismas misiones de siempre de Destiny.
La raid al menos sí está a la altura de las circunstancias y no solo es entretenida sino que juega bien con la tensión y las dosis de acción liberadas cada pocos segundos sobre tu equipo, que ya puede estar bien equilibrado en cuanto a clases y equipo. ¿El problema? Que la raid hace ver aún más claro lo flojo que es el resto del contenido del DLC.
La Oscuridad Profunda sigue siendo Destiny...
...¿pero es eso bueno? El juego de Bungie nos gusta por su cascarón, pero no por su contenido. Es un juego al que da gusto moverse y pegar tiros, pero en el que no podemos hacer gran cosa. Confiábamos en que La Oscuridad Profunda mejorara eso en algún sentido, pero no lo hace, y cuesta dinero.
Destiny se ha beneficiado más de las actualizaciones gratuitas y de las mínimas mejoras que ha hecho Bungie en estos meses que de una actualización de pago. Hablando en plata, La Profunda Oscuridad solo merece la pena por su raid. A ver qué tal la próxima actualización del pase de temporada, pero tenemos pocas esperanzas.
