Análisis de Gears of War 4 - Acción sin rodeos

Absolutamente cualquier cosa que un fan de Gears of War, desde el primero hasta Judgment, es exactamente lo mismo que se puede llegar a encontrar en Gears of War 4. La saga creada por Epic Games ahora en manos de The Coalition llega por fin con una entrega nueva a Xbox One y Windows 10, y lo hace siendo justo lo que el fan podría querer.

Gears of War 4 se ha conformado con ser continuista al máximo en todos sus aspectos. La forma en que se mueven y se comportan tanto J.D. Fenix y sus compañeros como los nuevos enemigos del Enjambre o los robots DeeBees es exactamente igual a lo que veíamos en el Gears of War original, hace ya diez años, y eso en el fondo, no está mal.

Análisis de Gears of War 4, tradición y continuismo

Si todo está igual que estaba, al menos quiere decir que todo sigue siendo igual de divertido, o más aún contando con los pequeños añadidos a la fórmula de shooter en tercera persona con coberturas y ametralladoras-motosierra, en una campaña con la suficiente variedad como para no llegar a ser repetitiva y con un buen ritmo que no llega a cansar.

Pero a pesar de durar entre 8 y 10 horas, la campaña de Gears of War 4 se llega a hacer corta, en parte por lo contínuamente trepidante de sus situaciones, y en parte por un final abrupto y abierto que deja con la impresión de que se podrían haber sacado un par de actos más, bien antes o después de ese final inconcluso.

Lo nuevo en Gears of War 4

Gears of War 4 añade ciertas pequeñas novedades interesantes, como esos DeeBees, un nuevo tipo de enemigos que explotan al ser destruidos y que hace que tengamos que movernos más de lo normal entre las coberturas o que no podamos abusar del cuerpo a cuerpo.

Y aunque el Modo Horda no es realmente nuevo, durante la campaña se introducen secciones que anticipan lo que podemos disfrutar en el Horda 3.0, construyendo torretas y barricadas para resistir oleadas de enemigos, pero funcionan mejor como esa presentación de un modo extra que como recurso para dar variedad a la campaña.

Lo que sí da variedad son las secciones en las que entra en juego el clima, varias veces durante la campaña (no suficientes) nos azuzará una tormenta de viento y fuego que cambiará el escenario e incluso nos permitirá aprovecharlo en nuestro favor, pero eso sí, teniendo cuidado con los rayos que se propagan por el suelo, que pueden ser letales.

Lo viejo en Gears of War 4

Pero salvo estas pequeñas novedades que no marcan un elemento diferenciador, todo en Gears of War 4 resulta tremendamente familiar para quien ya venga de entregas anteriores, y al ser tan similar a sus raíces, no resulta para nada sorprendente para quien ya venga de otros exponentes del género. Gears 4 sigue siendo Gears of War, pero algo de innovación no le habría sentado mal.

Lo mismo podría decirse de su trama, que va muy pareja a una mezcla entre Gears y Gears 2 con un grupo de nuevos personajes cuyos diálogos, cuando tienen algo de sentido, se sustentan sobre todo en lo no tan nuevo, en recordar lo que ocurrió en anteriores entregas y en glorificar a los anteriores protagonistas, cuyos diálogos tampoco eran nada del otro mundo.

La parte buena de que todo siga más o menos igual es que el armamento también conserva todas sus placenteras opciones. Desde la Lancer, que es perfecta, hasta la escopeta Gnasher, el Arco explosivo o el Boomshot, todo sigue en plena forma y, de hecho, ninguna de las armas nuevas es capaz de hacer sombra a los clásicos.

Buena campaña, y mucho más

Aunque hay ciertos cortes de ritmo y no viene a contar nada especial, la campaña de Gears of War 4 tiene muy buenos momentos que aderezan una acción frenética con impactantes estampas, pero no es lo único que tiene esta nueva exclusiva de Microsoft.

No podían faltar los modos online en Gears of War 4, modos para todos los gustos en los que se puede cooperar, tanto en la campaña como en el Modo Horda 3.0, como competir en una buena variedad de modos de juego por equipos que también incluye ciertas novedades.

Una de las más interesantes es el modo Dodgeball, donde al ser eliminado un jugador pasa al banquillo, del que sólo puede salir cuando alguien de su equipo acabe con un jugador del equipo contrario, creando partidas en las que las reapariciones son los bienes más valiosos.

Online, doblaje y Xbox Play Anywhere

Por ahora todo el entorno online ha funcionado a las mil maravillas. Cabe suponer que tanto la beta de Gears of War 4 como el aún activo Gears of War Remastered haya servido como un buen banco de pruebas, pero ningún tipo de lag ha entorpecido nuestras partidas, que se sucedían rápidamente sin problema para encontrar compañeros de equipo.

Además, Gears of War 4 cuenta con la función Xbox Play Anywhere, lo que hace que los poseedores de la versión digital de Xbox One puedan jugar también a Gears of War 4 en Windows 10, y los jugadores de ambas plataformas pueden jugar en las mismas partidas por el destino del planeta Sera.

Lo que no agradará a tantos es la decisión de Microsoft con respecto al doblaje en castellano del juego. Por ahora, Gears of War 4 está sólo disponible con voces en inglés y subtítulos en castellano. Las voces en nuestro idioma llegarán el próximo 1 de noviembre mediante un parche, lo que puede ser un motivo para que muchos vuelvan a jugarlo, pero por ahora sólo podemos escuchar a J.D., Kait y compañía en inglés.

Análisis de Gears of War 4 - Conclusiones

Gears of War 4 es un gran juego, una apuesta con tantas opciones como los anteriores y una campaña mejor llevada, y es meritorio para The Coalition el haber sabido conservar tan bien todo lo que hace especial a Gears, pero a la vez se echa en falta un poco de renovación en el estilo de juego o algo más de riesgo a la hora de construir al grupo protagonista.

Los fans de Gears of War tienen un motivo para alegrarse mucho con Gears of War 4 precisamente porque es exactamente igual de disfrutable que las entregas anteriores.