Hatsune Miku: Project DIVA F 2nd Análisis - 1, 2, 3, cha-cha-chá

Hatsune Miku: Project DIVA F 2nd es una curiosidad dentro de los videojuegos musicales y dentro del mundo de las propias idols, pues es una virtual con una garganta afinada por Vocaloid: un sintentizador de Yamaha que le pone personalidad a la buena de Miku. Si tenéis ocasión, leed un poco sobre el tema en wikipedias y demás. Os encontraréis con historias tan particulares como que ha conseguido telonear a Lady Gaga a través de un concierto virtual con hologramas.

Pero vamos a lo que nos ocupa: de qué va este Hatsune Miku: Project DIVA F 2nd y qué tal materializa su propuesta. El videojuego de SEGA y Crypton Future Media es uno musical, con unos cuarenta temas ordenados por dificultad que nos pide que sigamos el ritmo de los temas pulsando botones en nuestro mando.

Hatsune Miku: Project DIVA F 2nd es un videojuego musical exigente

A medida que vamos superando temas se desbloquean otros, además de otros utensilios, coleccionables y elementos para nuestra diva. Por supuesto, como ya es tradición en muchos títulos japoneses con adoración a sus protagonistas, podemos llevarnos a la diva a una habitación y, bueno, tocarla un poco.

A diferencia de otras producciones japonesas que se limitan a entregar material para el fan, con un juego excesivamente simple, fácil y complaciente, lo cierto es que Hatsune Miku: Project DIVA F 2nd, uno que te obliga a mirar su tutorial, a pasar por el juego fácil, primero, y luego avanzar hacia los siguientes niveles de dificultad.

El videojuego tiene mucho por desbloquear

Se agradece, entendiendo que la manera en la que el título dispone los comandos en la pantalla está muy bien pensado. Estos llegan desordenados, de cualquier punto de la pantalla, pero destacando para que sí sepas bien qué botón es; aunque a medida que avanzas por los niveles resulta más difícil prestar atención de manera visual al instante en el que el juego quiere que lo pulses.

Entender el porqué de esto es sencillo: Hatsune Miku: Project DIVA F 2nd quiere que realicemos la acción comprendiendo cada vez mejor las propias canciones, busca y fomenta la intuición; algo que acaba consiguiendo y define su curva de dificultad. En este sentido, el título de SEGA y Crypton Future Media es capaz de presentar una propuesta jugable sólida.

Hatsune Miku: Project DIVA F 2nd educa tu intuición musical

Los temas en sí son pegadizos, con ritmos que funcionan tanto para ser oídos como canciones con las que interactuar; claro que tienen que gustarte estas japonesadas y llegar a Hatsune Miku: Project DIVA F 2nd acostumbrado a los ritmos anime; vamos, que el videojuego no está aquí para convercerte de que el J-Pop es bueno o malo. Si no te va este estilo musical, olvídate de disfrutar este videojuego.

El resto del videojuego, sin embargo, es un tanto escaso. Falta una continuidad narrativa entre las diferentes fases, ya que éstas se presentan sin más. Una lástima porque en todo momento aparecen ilustraciones e imágenes de un montón de personajes de los que apetece saber más cuando te metes en el título.

Eso sí, si no te va el J-Pop mira para otro lado, este no es tu juego

A nivel gráfico también es un juego correcto y punto, tanto en su presentación como en su acabado general. De nuevo, es un título preparado para los que gusten de este tipo de producciones, sin mostrar ganas de convencer a ningún recién llegado. En ese sentido es un título algo frío; aquí llegas, juegas y luego recoges la recompensa para transformarlo en regalos y premios.

Esto gustará a los que ya gustan de Hatsune Miku, porque saben de qué va el asunto, pero espantará a los recién llegados. De todos modos, su propuesta jugable en sí como título musical de idols monas (y un poco pedobears) está bien llevada, lo que compensa su parca presentación y su sencillo acabado gráfico.