Xenoblade Chronicles X

Xenoblade Chronicles X es, junto al anunciado y nuevo Zelda de mundo abierto, el motivo más poderoso que un jugador, al que la retahíla de Marios varios no convence, tiene para hacerse con una Wii U. En el E3 2014 el esperado videojuego estuvo presente, mostrando sus encantos pero también sus debilidades.

Xenoblade Chronicles X no es una continuación del anterior, es, más bien, una secuela espiritual, algo así como el Dark Souls con respecto a Demon´s Souls. Las sensaciones de juego son similares, así como el interfaz gráfico, su mundo que parece infinito, la presentación de enemigos y hasta el tono general del título; lo que es de agradecer.

Si te gustó el primer Xenoblade Chronicles, este te fascinará, y a tus ojos.

El Xenoblade de Wii presentaba como elemento más poderoso el llevar una jugabilidad propia de MMO a un título single player, con una trama más elaborada que la de estos y poderoso componente de exploración, todo eso se mantiene en este nuevo título, con la suerte de que ahora corre en alta definición, mientras que aquel hacía que los ojos te sangraran. Ya solo por eso, merece la pena entregarle tus horas al nuevo videojuego de Monolith.

Wii U es un buen aliado de esta continuación, la mejor potencia de la máquina permite unos escenarios más bellos y unas criaturas más definidas en su dibujado. También colabora algo de lo que ya se nos hizo entrega en la primera entrega: unos muy buenos diseños de criaturas que entonan a la perfección con el habitat en el que viven.

Contará con criaturas que parecen más vivas en entornos más detallados

Pero no todo son halagos a este respecto. Un error que cometió el anterior y que también se hereda a este son unas animaciones un tanto toscas, que pese a que llegan afinadas, siguen mostrando personajes robóticos. Las texturas, rostros y modelados humanos no alcanzan la calidad de las criaturas y las armaduras, lo que se hace terriblemente patente en las cinemáticas.

La acción heredadad de un MMO, con esos ataques al aire que impactan igualmente, no colaboran a darle credibilidad al juego, y es una lástima, porque mientras algunas zonas y rivales se ven auténticos, con un alto grado de detalle y mimo, los protagonistas no le van a la par.

La verdad, más que verlo como un defecto, al poco tiempo de juego, uno se da cuenta de que esa no es la tarea de este juego. Tomando como punto de partida el anterior, lo que se busca es, primero, ampliar la escala del anterior. Ahora el videojuego se plantea como toda una odisea espacial, con una humanidad buscando nuevos lugares que colonizar y con la tecnología y los robots muy presentes.

Los rostros parecen de PS2 y desentonan en el potente conjunto.

Los escenarios se amplian, y también las ciudades, lo que vendrá favorecido por el empleo de esta tecnología y robots, y llevando a un nuevo nivel lo de recorrer el mundo a tu antojo. Esperemos que la linealidad del primero se desvanezca a la hora de investigar y que las secundarias favorezcan el acceso a nuevas rutas.

El combate también ha sufrido mejoras para favorecer la estrategia y la agilidad en las refriegas. Podremos alternar entre armas de corto alcance y de largo, permitiendo nuevas situaciones y unas peleas más ricas. A su vez, también se podrá variar entre clases en tiempo real, lo que habilita nuevas habilidades que ejecutar.

El uso de los robots favorecerá tanto el combate como la exploración

Xenoblade Chronicles X se configura como una reunión de todo lo bueno que tuvo el primero, pero ajustando y potenciando todo lo que hacía bien aquel: combate y exploración. Las mejoras en cuanto a personajes se reúnen en un completo editor, pero no estaría de más que los rostros fueran de la misma calidad que los lugares a los que llegamos. Aún así, su fórmula original es tan cautivadora que poco importa todo eso. Exploradores, bienvenidos a una nueva crónica.