Análisis Dead by Daylight para PS4, Xbox One y PC

Ha pasado un año desde el estreno de Dead by Daylight en PC. Un juego de carácter independiente que nadie, ni siquiera sus propios creadores, podrían llegar a imaginar hasta dónde iba a llegar. Doce meses después y casi dos millones de copias vendidas, se ha convertido en uno de los últimos éxitos de la industria. Para celebrarlo, ahora recibe sus correspondientes versiones en PS4 y Xbox One.

Es un juego nacido para triunfar, sobre todo en estos tiempos donde YouTube es una parte tan fundamental. Ni qué decir tiene que Dead by Daylight no hubiese podido triunfar de esta manera tan categórica si los youtubers e influencers más importantes de internet no lo hubiesen tenido en cuenta para realizar sus contenidos. Y nos encontramos ahora aquí, valorando si su éxito es justo o no.

Dead by Daylight triunfa porque su base es sólida

En este caso os podemos confirmar que sí, que Dead by Daylight, lejos de cualquier polémica, es un muy buen videojuego. Se apoya en una base sencilla y simple, pero que a su vez puede servir para profundizar enormemente. Ese es el equilibrio perfecto que da al juego las herramientas necesarias para enganchar.

Pero antes de hablar de esos elementos de más, comentemos de qué trata. Dead by Daylight es un título centrado en el modo multijugador, donde cuatro jugadores reales encarnan el papel de Supervivientes. Otro jugador, también real, se mete en la piel de un Asesino que vaga por el mapa tratando de acabar con los demás antes de que encuentren la salida.

Enormes posibilidades ante una simple idea

Es como un escondite macabro, para que nos entendáis, aunque en este caso si te encuentran quedarás colgado de un gancho hasta que te desangres si tus compañeros no te rescatan primero. Sin embargo, ahí está la gracia ya que todas las partidas suelen ser diferentes: podemos cooperar con el resto de supervivientes, o no, y entran en juego las habilidades y Perks.

Dead by Daylight cuenta con un profundo sistema de mejoras y niveles, consiguiendo que cada personaje pueda ser completamente diferente a los demás. Podemos construir un personaje al que se le dé increíblemente bien activar los generadores necesarios para abrir las puertas de salida, o a otro que se le da estupendamente huir del asesino, o a otro que se encarga de sabotear los ganchos para que no pueda colgar a sus víctimas...

Lo mismo ocurre con los Asesinos

Y esa sensación de progresión y mejora de los supervivientes se multiplica en el caso de los Asesinos, ya que además de contar con un montón de habilidades y Perks que desbloquear, cada uno es un mundo. Tenemos al asesino capaz de poner trampas en el escenario, a otro que puede tumbar de un solo golpe, otro que puede teletransportarse 20 metros hacia delante de manera rápida, otro que pone señuelos...

Esto es lo que hace de Dead by Daylight una experiencia mucho más profunda de lo que parece a simple vista. Es lo que consigue enganchar a los jugadores, que no solo siguen jugando una y otra partida sin parar porque resulten divertidas, que lo son, sino por un sistema de progresión bien medido y excitante.

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Pocos errores para un juego que funciona muy bien

Es cierto que en todas las versiones, incluyendo las nuevas para PS4 y Xbox One, Dead by Daylight presenta bugs esporádicos que en la mayoría de ocasiones no entorpecen las partidas, pero que ahí están. También se podría haber incluido una mayor y mejor lista de mapas, ya que los escenarios se parecen mucho entre sí y apenas ofrecen diferencias como para variar la experiencia.

Pero es en lo demás donde Dead by Daylight funciona muy bien y resulta divertídisimo, tanto para aquellos que quieran jugar solos y formar una build interesante como para esos que quieren disfrutar de un juego en equipo, con amigos, que va a depararles muchos buenos momentos. El éxito del juego no es solo cosa de YouTube.