Análisis de Atomic Heart - Un aspirante a la galería de la fama

    Cinco años de espera han demostrado ser más que suficientes para lograr un buen resultado. Te lo contamos en nuestro Análisis de Atomic Heart: Un aspirante a la galería de la fama

    A un día de su lanzamiento y después de una larga espera, la ópera prima de Mundfish llega para conquistar los corazones atómicos de los usuarios. Te contamos de qué va sin spoilers, jugabilidad y rendimiento en nuestro análisis de Atomic Heart: Un aspirante a la galería de la fama del videojuego.

    Análisis de Atomic Heart

    Atomic Heart es el resultado del proyecto inicial de cuatro personas que terminaron por convertirse en un gran estudio de 130 profesionales de todos los rincones del planeta. Con sede en Chipre, Mundfish ha logrado reunir un gran número de talentos para conseguir su objetivo: Crear un juego capaz de mirar de tú a tú a juegos de gran calidad como Bioshock, Fallout y Doom. ¿El secreto? Un gran trabajo, mimo en todos los detalles y una obsesión por hacer de su mundo algo realmente único a nivel visual y narrativo.

    Focus Entertainment

    Localizado en un rincón de la URSS en un pasado alternativo a forma de what if, Atomic Heart nos lleva a un nuevo 1955. Los grandes avances en robótica han llevado a la potencia comunista a ganar la II Guerra Mundial antes de la participación de los Estados Unidos. Esto, unido al descubrimiento del neuropolímero, han convertido a la nueva vieja URSS en la mayor potencia mundial, que se prepara para conquistar el espacio y colonizar los planetas del sistema solar.

    Un protagonista de excepción

    En medio de esta era de descubrimientos, el Kremlin se prepara para lanzar al mercado su dispositivo PENSAMIENTO. Una interfaz neural totalmente gratuita que permitirá a los soviéticos y a los ciudadanos de todo el mundo conectar entre ellos, enviarse mensajes y mandar órdenes a los robots de forma telepática. Todo está listo para el lanzamiento de PENSAMIENTO en una gran gala mundial: el Día de la Polimerización, pero una serie de problemas en la instalación 3826 requieren la atención de nuestro protagonista, el agente de operaciones especiales P-3.

    Focus Entertainment

    Tras un prólogo de impacto que te volará la cabeza y una primera misión lineal, la instalación 3826 se abrirá ante nosotros con todo su esplendor. Un escenario abierto pero de tamaño limitado en el que podrás seguir la campaña principal, explorar sus rincones y acceder a las áreas de prueba: zonas secundarias plagadas de mejoras, recompensas y datos sobre los puntos y personajes más importantes de la misión.

    Lucha con cabeza

    Atomic Heart es un shooter en primera persona con elementos de mejora y personalización. Todos los elementos jugables están relacionados con los puzzles y la estrategia, lo que te obligará a luchar con cabeza y elegir bien qué enemigos derrotar primero si no quieres que la pantalla se llene de robots y monstruos. Eliminar las cámaras de alarma y los nidos de robots reparadores y brotes será básico para poder dedicar tiempo a los bichos más tochos. A esto se añade un sistema de daños y resistencias que, en los niveles de dificultad normal y avanzada, requerirán que elijas sabiamente cómo y con qué enfrentarte a cada amenaza.

    Focus Entertainment

    Para ayudarnos a salir con vida de la misión, Atomic Heart incluye un sistema de armas y habilidades plagado de posibilidades. Por un lado, contamos con una gran cantidad de armas a distancia y cuerpo a cuerpo que podemos construir, personalizar y mejorar en una máquina muy... curiosa llamada NORA. A esto se une un sistema de poderes parecido a los plásmidos de Buioshock que nos permitirá realizar distintos ataques elementales e incluso usar un escudo y mejorar a P-3 con más de 90 habilidades propias. Si necesitas algo más, personaliza tus armas con un módulo de cartuchos para añadir daño de fuego, hielo o eléctrico a todas tus armas de munición y cuerpo a cuerpo.

    Pensar para ganar

    El combate es sólo uno de los elementos que demuestran esta necesidad de Mundfish por llevar al jugador a pensar mientras avanza en su aventura. La campaña principal está plagada de puzzles de todo tipo, algunos muy sencillos, como los de las cerraduras y los relés, y otros más complejos, como los que incluyen elementos como los envases y que suelen estar mezclados con el género de las plataformas. tendrás que usar la cabeza mientras saltas por determinadas zonas del escenario, buscas envases y piensas en la mejor forma de hacer que esa puerta se abra o el droide Raf te acepte tu billete de viaje.

    Focus Entertainment

    La exploración no se libra de esta invitación a estrujarnos la sesera, convirtiendo sus zonas secundarias, las áreas de pruebas, en todo un reto a la imaginación y al pensamiento intuitivo. Tendrás que explorar la zona, adivinar el mecanismo y hackear torres de comunicación con las que invocar a drones gigantes para poder acceder a estas zonas prohibidas y hacerte con sus secretos. Si te cansas, siempre puedes coger un coche -rojo, por supuesto-, y dar una vuelta machacando robots mientras escuchas la potente banda sonora que incluye el juego y buscas nuevas zonas de recursos y retos más allá de la campaña principal.

    Desde Rusia, con amor

    Más allá de la explosiva jugabilidad, Atomic Heart ofrece un mundo único que parece la respuesta directa al famoso retrofuturismo norteamericano. El diseño de robots y escenarios hace gala de una arquitectura carismática y un uso de los elementos más emblemáticos del comunismo soviético y la propaganda de la guerra fría para crear un entorno de juego con una fuerte carga de narrativa visual. El placer de pasear por sus calles en el prólogo mirándolo todo es igualable a lo gratificante de conducir por sus hermosos escenarios plagados de colores y líneas suaves mientras escuchas algunas canciones que sin duda terminarán en tu playlist personal.

    Focus Entertainment

    Si hay una palabra que defina a la perfección lo que es Atomic Heart, esta es Carisma. Carisma en mayúsculas con una personalidad propia que no tiene nada que envidiar a los juegos en los que se inspira para dar vida a su mensaje: Fallout, Bioshock y Doom. Elementos conocidos y familiares de estos juegos se dan la mano con una forma diferente de utilizarlos y todo este universo propio de la unión soviética de mediados de siglo XX para crear un todo que entra demasiado bien como para no aplaudir el gran trabajo hecho en Mundfish con éste, su primer videojuego.

    Atomic Heart: Un aspirante a la galería de la fama

    Todos los elementos del juego han sido mimados al milímetro para dar como resultado un juego que quería estar a la altura de un triple A de estudio consolidado y que parece haber cumplido su objetivo. Su gran historia, su ácido sentido del humor y elementos como las animaciones que podremos disfrutar al morir en forma de dibujos animados sobre el rótulo de Game Over; se unen a un gran rendimiento y una jugabilidad a prueba de bombas nucleares que te tendrá pegado al asiento hasta que veas los créditos finales... de los dos finales -al menos hemos descubierto dos- que incluye su fascinante trama argumental.

    Focus Entertainment

    El broche de oro lo pone el apartado sonoro, con una lista de melodías ambientales muy bien llevadas junto a canciones modernas,, música clásica reversionada y algunos temazos metaleros que suenan en los momentos de mayor tensión del combate. A esto se une un doblaje sobresaliente en castellano en el que se dan la mano actores y actrices de gran talento que seguro que te suenan de otros juegos y películas. Un trabajo brillante que se apoya en una localización a la altura con expresiones y tacos muy bien metidos en sus múltiples diálogos y en algunos momentos cruciales de la aventura.

    ¿Merece la pena?

    Atomic Heart llega mañana 21 de febrero a PS4, PS5, PC , Xbox One y Xbox Series X/S, disponibles en tiendas, plataformas digitales y Game Pass, donde estará jugable desde esta madrugada a las 00:01 sin coste añadido en PC, Steam Deck y consolas Xbox. la versión probada en PS5 rinde como un tiro con un aspecto que mira a cara a cara a los juegos triple A y que incluye algunos momentos realmente bellos. tras jugar 22 horas para realizar este análisis, desbloquear dos finales y entrar en un par de áreas de pruebas, Atomic Heart me ha conquistado lo suficiente como para estar deseando volver a su mundo para completar el resto de secundarias que prometen unas 15 horas extra mientras espero noticias de una más que posible secuela.

    Entonces... ¿merece la pena? Rotundamente sí. Atomic Heart es una gran sorpresa, el segundo tapado de un 2023 que parece decidido a convertirse en el mejor año para el videojuego a pesar de estar aún en febrero. Puede que algunas zonas se hagan machaconas -ya que se encargará P-3 de quejarse por ti- y que algunos rostros no estén muy conseguidos, pero quitando estos pequeños detalles, Atomic Heart es un juego redondo, sólido como una roca, que no hace más que mejorar hasta llegar al fin a sus créditos finales. Otro indispensable para una lista que no hace más que crecer.

    8.5

    Pros y contras

    • Carisma y personalidad
    • Jugabilidad
    • Doblaje e historia
    • Algunos momentos se hacen un poco machacones

    Atomic Heart

    Disponible desde 17 february 2023

    Más sobre este juego
    Loading...
    x

    © 2005 - 2024 Todos los derechos reservados.

  • Contacto