Análisis de Capcom Arcade Stadium: dos décadas de maquinitas

Si eres un veterano en esto de los videojuegos y viviste la época de oro de los salones arcade, sin duda estarás deseando saber cómo ha salido el último recopilatorio de Capcom para consolas. Hoy te lo contamos en nuestro análisis de Capcom Arcade Stadium: dos décadas de maquinitas en un solo recopilatorio.

De vuelta en los viejos recreativos

Si hay algo en lo que los videojugadores veteranos somos especialmente pesados es con las historietas sobre los viejos salones arcade de los 80-90. Dale una cerveza a un yayogamer y pregúntale por los viejos tiempos y podemos pasarnos horas, días, semanas... e incluso años hablando de la felicidad en forma de monedas y cabinas arcade. Partidas fenéticas en las que el pago por adelantado hacían que cada vida valiera oro puro.

Más allá de los videojuegos en cuestión, de sus gráficos alucinantes y las partidas de pago. Los recreativos, salones arcade o maquinitas se convirtieron en toda una sub-cultura a la que los videojugadores de la época nos vimos atraídos irremediablemente. Entrar en unos recreativos nuevos, buscar qué máquinas desconocidas tenían o tratar de encontrar esa máquina que te tenía loco fue, para muchos, una de las actividades más divertidas que podías llevar a cabo en la adolescencia.

Capcom es muy consciente de esta magia, y tras dos meses desde su lanzamiento en Switch y PC, Capcom Arcade Stadium llega a las consolas Playstation y Xbox para tratar de recuperar parte de esa magia de antaño. la sensación de volver a entrar en un salón arcade, elegir la máquina, echar la moneda y empezar a jugar sólo o a dos players está tan conseguida que merece un aplauso por su buen hacer en estas lides.

Dos décadas de maquinitas

La sensación de elegir máquina está, como te decimos, muy conseguida. No sólo eliges la máquina a la que vas a jugar, sino que además puedes elegir la versión occidental o la japonesa con el consiguiente cambio de nombres, escenas y hasta niveles. Capcom Arcade Stadium recoge en un sólo título dos décadas completas con sus mayores éxitos, y deja en manos del jugador el decidir cuán grande quiere que sea su salón arcade: Salón de lujo con todas las máquinas, salón de barrio comprando packs con algunas o máquinas de bar eligiendo tan sólo unas pocas. Respecto al catálogo de máquinas disponibles y los packs, son los siguiente:

Dawn of the Arcade (1984–1988)

• Vulgus (1984)
• Pirate Ship Higemaru (1984)
• 1942 (1984)
• Commando (1985)
• Section Z (1985)
• Trojan (1986)
• Legendary Wings (1986)
• Bionic Commando (1987)
• Forgotten Worlds (1988)
• Ghouls ‘n Ghosts (1988)

Arcade Revolution (1989–1992)

• Strider (1989)
• Dynasty Wars (1989)
• Final Fight (1989)
• 1941: Counter Attack (1990)
• Mercs (1990)
• Mega Twins (1990)
• Carrier Air Wing (1990)
• Street Fighter II (1991)
• Captain Commando (1991)
• Varth: Operation Thunderstorm (1992)

Arcade Evolution (1992–2001)

• Warriors of Fate (1992)
• Street Fighter II Turbo: Hyper Fighting (1992)
• Super Street Fighter II Turbo (1994)
• Armored Warriors (1994)
• Cyberbots: Full Metal Madness (1995)
• 19XX: The War Against Destiny (1995)
• Battle Circuit (1997)
• Giga Wing (1999)
• 1944: The Loop Master (2000)
• Progear (2001)

Presentación impecable

Poca pega se pude poner a los títulos y a las facilidades a la hora de elegir tu maquinita. Pero más allá de la elección de un catálogo forjado a golpe de indispensable, uno de los mayores aciertos de este Capcom Arcade Stadium está en su forma de presentar los juegos. Podemos elegir todo tipo de marcos, tanto en forma de franjas laterales como en forma de cabina. Un punto de vista ideal para aprovechar su compatibilidad con los mandos arcade y jugar frente a la tele como si estuviéramos ante una máquina de verdad.

Junto a la posibilidad de personalizar los marcos tenemos un montón de opciones y ajustes a la hora de personalizar la partida. Aumentar o disminuir la velocidad en tiempo real durante el juego a través del gatillo inferior izquierdo, cambiar la dificultad, participar en rankings, cumplir distintos desafíos o, simplemente, echar una moneda y añadir un nuevo jugador a la partida. Y todo esto sin necesidad de pedirle cambio al tipo de la riñonera de cuero.

Regreso a tiempos mejores

Capcom Arcade Stadium demuestra que en Capcom han aprendido mucho de recopilatorios anteriores. La elección del catálogo y la sensación de redescubrir Street Fighter 2 por segunda vez es toda una delicia en la que la jugabilidad se adapta totalmente a las necesidades de la tecnología actual.

Un recopilatorio que tiene todo lo necesario para justificar su lanzamiento y que hará las delicias de los que recordamos con añoranza esa época dorada de los 80-90, a la vez que sirve para explicar a las nuevas generaciones todo lo que significaron en su momento títulos como Captain Commando, Street Fighter 2, Final Fight, Ghosts'n Goblins o Mercs. Tras este lanzamiento y el que te contamos en nuestro Análisis de Ghosts'n Goblins Resurrection: un retro renovado, nos queda claro que Capcom está más comprometida que nunca con su pasado y el futuro de sus juegos.