Análisis de RiME para PS4, Xbox One y PC - Uno de esos juegos que hay que jugar

RiME sabe avanzar sobre sus muchos referentes. En sus escenarios, mecánicas y narración encontramos reminiscencias de From Software, Naughty Dog, Jonathan Blow y Fumito Ueda, pero rápidamente sabe encontrar su propio discurso para contarnos su historia a su manera. Tequila Works ha desarrollado una aventura que en seis horas sabe contarnos mucho, una que se narra a través de mensajes ocultos en el escenario, evocaciones tras un acertijo y un universo jugable sólido y compacto una roca.

Todo en RiME funciona bien porque está dispuesto en el videojuego con mucho acierto y elegancia. Exploramos entornos, algunos diseñados como un tapiz tímido que oculta una historia que hay que buscar, pasillos estrechos en los que caminamos a través de una tenebrosa oscuridad y luminosos parajes pintados por la noche y el día. En ellos nos tocará superar puzzles que en ningún momento interrumpen la fluidez de la partida; son más bien la interacción del jugador con la narración, activando los mecanismos que la hacen avanzar.

RiME es un trabajo de narración espectacular, y muy divertido

Solo hay un momento en el que RiME no ordena bien cómo nos movemos por el escenario, comprendiéndolo, disfrutándolo y sumergiéndonos en su profundo relato. En este análisis de RiME hemos de señalar un acto en el que tenemos que escapar del acecho de un monstruo, ¿y cómo lo hacemos? Abusando de un esquema de juego de sigilo y plataformas heredadas de Uncharted 4.

En esa fase, que dura lo suyo, RiME pierde esa magia que tiene, convirtiéndose en un título del montón. Por fortuna, y aunque el ritmo de juego se estropea en ese punto, acaba siendo satisfactorio para lo que el juego nos quiere contar. Ese defecto, una cámara que a veces juega malas pasadas y un rendimiento irregular que produce tirones al jugar son los pocos defectos que podemos señalar en este análisis de RiME.

A través de acertijos, una pizca de plataformas y mucho ingenio, RiME nos cuenta su historia

En lo técnico, RiME no es una bestia portentosa, pero sí artística. Su diseño de escenarios es sublime, tanto por su aspecto por cómo están integrados los puzzles y su exploración. Su banda sonora es sorprendente y casa a la perfección con la manera que tiene el niño que interaccionar con el mundo de juego: con su voz. Si pulsamos el botón triángulo (hemos analizado la versión de PS4), el muchacho reirá, gritará o tendrá miedo. Eso activará distintos elementos, como si la isla quisiera que nos expresáramos y eso abriera la puerta al fondo del misterio de RiME.

Llegamos al final del análisis de RiME recomendándoslo. Tequila Works ha hecho un gran trabajo preparando un juego que aunque se inspire en muchos referentes consigue formular un juego formidable, auténtico y único. No os lo podéis perder.