Análisis Ratchet and Clank - Un regreso a la altura

Ratchet and Clank fue una franquicia de éxito para Sony hace ya dos generaciones. No solo porque se trataran de juegos de cierta calidad, sino porque eran prácticamente los únicos ejemplos propios de títulos de plataformas por los que apostaba la compañía en su PlayStation 2.

Ahora, dos generaciones después, llega Ratchet and Clank, que no se trata de una remasterización del primer juego sino una reinterpretación, aprovechando también el estreno de la película que tiene cierta importancia en la obra, aunque no es lo más importante en este caso, ya que el juego cumple con creces.

Análisis Ratchet and Clank - La mezcla funciona

Lo que ha planteado Insomniac en esta ocasión con Ratchet and Clank es un videojuego que también incorpora algunas de las escenas de su próxima película, creando en conjunto la sensación de que estamos desarrollando la misma historia de manera más interactiva y directa.

Entre las fases de Ratchet and Clank se cuelan, como si fuesen las típicas secuencias cinemáticas, estas escenas de la película. Quizás no se fusionen de manera demasiado correcta para generar una historia totalmente comprensible, pero tampoco es lo más importante del juego. Más allá de eso cabe destacar que se trata del juego más equilibrado de la saga.

Análisis Ratchet and Clank - El equilibrio de la saga

El Ratchet and Clank original destacó por ser un juego de plataformas con cierta presencia de acción al enfrentarnos con distintos enemigos, pero el grueso de la experiencia eran los saltos y las habilidades que nos hacían explotar aún más esa faceta del juego.

Con las entregas posteriores todo cambió, y de las plataformas se fue dando cada vez más protagonismo a la acción, hasta que la final todo giraba en torno a ello. Podríamos decir sin miedo a equivocarnos que este nuevo Ratchet and Clank se trata de la entrega más equilibrada de todas.

Hay presencia de plataformas y de distintas fases de habilidad, pero también hay muchos enfrentamientos y momentos de acción frenética. Parece que el estudio ha querido cuidar de manera especial el ritmo de la obra y ofrecernos algo variado en todo momento.

Análisis Ratchet and Clank - Cada mundo es un mundo

En Ratchet and Clank visitamos distintos mundos y casi siempre podemos decidir nosotros mismos hacia dónde dirigirnos y qué objetivo principal o secundario cumplir. Lo bueno de estos mundos es que cada uno cuenta con sus propias características, más allá simplemente del cambio estético y visual.

Cada mundo en Ratchet and Clank tiene sus propias características, algunos están más centrados en los combates en campo abierto mientras que otros centran el protagonismo en los escenarios más cerrados y en las fases de plataformas o habilidad.

Además, en ocasiones se nos proporcionarán elementos propios y únicos de cada mundo (como un jet volador, por ejemplo) que no conservaremos en otros lugares. Esto genera la sensación de que el jugador debe adaptarse a las circunstancias que Ratchet and Clank plantea en cada momento, sin sentir en ningún momento que es repetitivo.

Análisis Ratchet and Clank - La variedad como bandera

Si con la diferencia entre los mundos no es suficiente podéis estar tranquilos, ya que Ratchet and Clank también incorpora varias pruebas diferentes que aportan todavía más variedad al conjunto. Habrá ocasiones en que tengamos que montarnos en nuestra nave espacial para vivir batallas en el aire, por ejemplo, o realizar carreras en un aerodeslizador.

Junto a esto también tenemos las fases en las que controlamos a Clank, el pequeño robot, que se centrarán en los puzles y no tanto en los combates. Cabe destacar el buen diseño de estos niveles y la ajustada dificultad, que seguro que convence a la mayoría de jugadores.

Análisis Ratchet and Clank - Armas por doquier

Ratchet and Clank cuenta con un sistema de mejora de armas, junto a la posibilidad de comprar un montón de ellas. Todas son diferentes y aunque al final simplemente destaquen por ser más o menos efectivas a largo o corto alcance, cada una cuenta con sus particularidades.

De esta forma, es una gozada dominar el control y comenzar a utilizar todas las armas a nuestra disposición para adaptarnos a los enemigos y a las circunstancias, sin contar con aquellas que son muy cómicas y que ayudan a generar una identidad propia en el juego, como el Ovejéitor (que transforma a los enemigos en ovejas) o una bomba que hace que se pongan a bailar.

Análisis Ratchet and Clank - Tono divertido en todo momento

Porque si hay algo que destaca en Ratchet and Clank es su sentido del humor, presente en prácticamente todo el juego. Aunque los protagonistas no son los más carismáticos de la historia, siempre soltarán alguna frase que hará que sonriamos, junto a diversas situaciones extrañas, curiosas y divertidas.

También destacamos el tono de las propias secuencias sacadas de la película, que parece que también mantendrá ese mismo tono distendido. Es una gozada formar parte de un todo que se muestra tan coherente en este sentido, derrochando personalidad.

Análisis Ratchet and Clank - No es el mejor plataformas existente, pero da gusto

Podemos llegar a esa conclusión final: Ratchet and Clank no es el mejor juego de plataformas y acción existente en el mercado, pero su variedad y lo bien que funciona todo en conjunto hace que sea totalmente satisfactorio ponerse a jugar. Siempre apetece seguir adelante y descubrir qué sorpresas vamos a encontrarnos en el siguiente mundo.

El control funciona perfectamente, todo es divertido, los enfrentamientos contra los jefes finales son desafiantes y la dificultad puede adaptarse a cualquier tipo de jugador existente. Ratchet and Clank regresa por la puerta grande a PS4 y esperamos que sea para quedarse mucho tiempo junto a nosotros.