Samurai Warriors 4 Análisis

Los musou son un género muy particular. Quizá el más suyo de todos, por aquello de que su público es principalmente japonés, de que sus mecánicas son repetitivas pero enganchan y de que sus historias, personajes y escenarios no hay por dónde cogerlos, pero tienen un algo que hace que sigamos jugándolos

Si no fuera así, no existirían ocho Dinasty Warriors dentro de su línea principal o un 'competidor' como Samurai Warriors 4, la última entrega de la saga hasta el momento. Y lo llamamos 'competidor', entre comillas, porque ambas franquicias pertenecen a Tecmo Koei, los únicos que a día de hoy siguen publicando juegos de este tipo con moderado éxito.

Samurai Warriors 4 es lo mismo, pero no es igual

Como suele, Samurai Warriors 4 se ambientan en la historia japonesa, en un momento donde el camino de lo samurai se estaba perdiendo y la guerra había empezado a modernizarse. Y en medio de este conflicto, Oda Nobunada, Takeda Shingen y otro buen puñado de personajes picarán miles de kilos de carne del enemigo con tal de mantener su terrotorio.

Esto no debería sorprender a nadie: es lo más básico de todo musou que se precie. Hay que atacar a cientos de peones a la vez, repetir combos como si no hubiera mañana y avanzar zona tras zona vaciándola de vida y peleando ocasionalmente contra algún enemigo más fuerte de lo normal.

Personajes a porrillo

Samurai Warriors 4 cuenta con 55 personajes en total, una buena plantilla con muchas caras conocidas y algunas nuevas, como Koshosho, Naotora Ii o Kagekatsu Uesugi de entre los doce nuevos personajes. Y también es posible crearse un personaje propio

Lo importante de esto no es tanto la cantidad sino cómo el nuevo sistema de combate de Samurai Warriors 4 hace que luchar con cada uno de sellos sea diferente. Esto lo mejor que tiene el juego junto con los nuevos Hyper ataques, que surgen de la combinación de un combo de ataques fuertes con otro normal que lanza un golpe nuevo.

También hay nuevos ataques especiales, que tienen diversos efectos dependiendo del personaje: pueden mejorar su potencia, lanzar un ataque único, soltar una trampa... A medida que ganamos niveles, estos especiales también ganan variaciones, al igual que los Hyper y los ataques normales.

En otras palabras, el sistema de combate de Samurai Warriors 4, para ser un musou, es bastante completo y variado y jugar con cada personajes es algo atractivo y que apetece, cosa que no se puede decir siempre de Dinasty Warriors, por ejemplo.

Misiones, pantallas, armas, cooperativo...

Obviamente, no todo es gloria en el juego, pero al menos hay contenido para dar y tomar.

Los objetivos en Samurai Warriors 4 siguen siendo aburridos y poco variados: matar a alguien, llegar a un punto concreto, matar a determinado número de soldados, y fuera. Al menos, están bien introducidos mientras juegas la historia.

Cada pantalla, al menos, se completa con dos personajes: el que tú usas y otro más, con el cual puedes alternar control en cualquier momento de la partida. Puedes usarlos para completar un objetivo con fuerza combinada o, esto es muy útil, mandarlos cada uno a una punta e ir ganando más territorio más rápido.

Y por supuesto, hay un buen puñado de nuevas armas, que suben de nivel también, pero lo más impresionante quizá es que se pueden usar monturas para lanzarse al ataque. El problema es que su manejo es mejorable y habrían necesitado un poco más de pulido.

Por último, el cooperativo es una grata idea, pero no funciona nada bien y encontrar un compañero es bastante complicado, pues el matchmaking se produce ya dentro de la misión concreta en la que quieres jugar.

Samurai Warriors 4: buen juego, mejor musou

Es decepcionante que un juego con buenas ideas muestre evidentes faltas de atención en su fluidez, en los gráficos y en aspectos menores que, de haberse cuidado un poco más, habrían hecho sobresalir aún más el buen conjunto general de sus mecánicas.

Pero bueno, la variedad de modos, personajes y las gratas ideas introducidas en el sistema de combate son más que suficientes para animar a cualquier fan del género a lanzarse de cabeza a por él. Y quienes tengan curiosidad, se encontrarán con algo más completo que Hyrule Warriors y más variado que Dinasty Warriors, aunque este siga siendo el buque insignia.