Shadow Warrior

Shadow Warrior es uno de esos títulos míticos que nos han proporcionado incontables horas de diversión y risas durante muchos años y en este caso ha sufrido ya varias "encarnaciones".

El origen de Shadow Warrior

Sin ir más lejos esta remasterización para PS4 y Xbox One es la tercera versión del mismo ya que la anterior fue publicada por el mismo estudio, Flying Wild Hog en 2013, que a su vez se inspiraba en la original aparecida en 1997 de la mano del legendario estudio 3D Realms (los creadores de Duke Nukem).

Shadow Warrior se integra dentro de ese grupo de shooters en primera persona clásicos de los noventa en los que no solo se consiguieron unas mejoras técnias auténticamente rompedoras para su época sino que además contenían muchos elementos destinados solo para públicos adultos, un mercado reservado entonces para el PC. Violencia desmesurada y sin un ápice de realismo, sangre a borbotones, sexo y humor irreverente de gran desparpajo destacan como factores clave en muchos de estos shooters (Doom, Wolfenstein 3D, Blood...).

En 2013 se publicó de la mano de Flying Wild Hog la primera "remasterización" que daba un lavado de cara completo al clásico y lo actualizaba técnicamente aunque en lo relativo a las mecánicas sigue siendo considerado como un shooter de tipo clásico por su diseño y desarrollo de juego. Esta es la versión que aparece ahora mejorada en consolas de octava generación.

Demonios y katanas

La historia de Shadow Warrior es, como en todos los shooters tradicionales, absurda y compuesta de un cúmulo de tópicos de género que no hay que racionalizar más alla de ser la excusa para dar katanazos a diestro y siniestro para machacar demonios de todo tipo. En ese sentido no esperéis personajes bien elaborados o una trama que avance de una forma lógica o coherente, todo está puesto al servicio de la diversión y nada más que la diversión.

Shadow Warrior nos pone en la piel de Lo Wang, un asesino que trabaja para un millonario de negocios japones. Este envía a Lo a comprar la Nobitsura Kage, una poderosa katana, a un coleccionista. Tras negarse este a la transacción Lo intenta hacerse con la espada por la fuerza y termina siendo capturado aunque será liberado poco después al producirse un ataque de demonios (sí, la cosa va de mitología asiática).

Lo se alía con un demonio llamado Hoji que le descubre los secretos de la misteriosa espada, capaz de destruir a demonios y otras criaturas inmortales. Además Lo Wang descubre que Nobitsura en realidad se compone de tres espadas distintas por lo que se lanza a la búsqueda y captura de las tres para formar el arma más poderosa del universo.

Combate y gráficos mejorados

El meollo de Shadow Warrior sigue siendo la acción pura y esta viene reforzada por su sistema de combate y el catálogo de armas, ya sean sobrenaturales (la cabeza y el corazón de demonio) o más terrenales, armas de fuego o de filo con la fantástica katana como alma pater del festival de desmembramiento de todo tipo de miembros demoniacos a tajazo limpio. La versión remasterizada de Shadow Warrior de PS4 ha incluido además la posibilidad de controlar las espadas por medio del panel táctil lo que abre nuevas posibilidades a la hora de cortar todo lo que se te ponga por delante.

Se han añadido nuevas posibilidades de personalización y mejora de la armas y de los superpoderes, lo que promete enriquecer el sistema de juego sin cambiar el núcleo básico: un shooter sin complicaciones a la antigua usanza. Los gráficos lucirán estupendos en las consolas de presente generación, con una resolución de 1080p en PS4 y de 900p en Xbox One y unos 60 fps en ambas consolas (queda por ver si se producen ralentizaciones aunque desde Flying Wild Hog se asegura que se ha optimizado Shadow Warrior al máximo para evitar esto).

¿Un shooter más en un mercado saturado?

Shadow Warrior es un título que no viene a revolucionar el tan trillado género de los shooters. Ni tampoco pretende hacerle sombra a los mastodontes que desembarcarán en noviembre y diciembre (Call of Duty: Advanced Warfare o Halo: The Master Chief Collection entre otros). Es un título consciente de sus limitaciones y que sabe a qué público va dirigido, un público que no necesita el modo multijugador y que se aburre con la pasividad inducida de los Call of Duty o la excesiva grandilocuencia de la saga Halo.

Si lo jugaste en la anterior generación o en PC, esta nueva remasterización posiblemente no te ofrezca contenido suficiente como para justificar su compra pero si nunca lo jugaste y te apetece volver atrás en el tiempo a una época en la que todo era más sencillo y directo y en la que la acción nunca desbordaba al jugador sino que estaba siempre supeditada al control del mismo, Shadow Warrior puede ser una buena alternativa a los blockbusters al uso. Su temática, estética y sobretodo sistema de juego le dan personalidad y diversión por los cuatro costados.