10 Claves para sobrevivir en Dark Souls II

1. Mucho cuidado con morirte

¿Qué consejo más tonto para Dark Souls II, verdad? En un juego donde la muerte es una mecánica fundamental, aconsejar esto es una tontería; pero tenemos que hacerlo porque, además de penalizar el porcentaje de vida que tienes como hueco de forma progresiva; volver a la vida no es tan fácil: solo se puede revivir si consumes una efigie humana y estas son limitadas en el juego. Al principio parece que abundan, pero vaya, no siempre será así. No las gastes a lo tonto.

2. Comprende las nuevas estadísticas y los cambio

La adaptabilidad y el aguante son dos nociones más o menos nuevas en la saga. La primera acelera las animaciones del personaje si se mejora y la segunda aumenta la carga de equipo, algo que antes se hacía aumentando el vigor. Ahora subes más niveles que en previos juegos, y tendrás que aprender a equilibrar mejor las estadísticas. Si metes la pata, tranquilo: siempre puedes buscar al personaje que te deja cambiarlas desde cero.

3. El peso de la armadura funciona algo diferente

En Dark Souls, tu voltereta cambiaba a medida que llegabas a unos límites de tu peso de equipo (<25%, <50% y <75%), pero ahora eso es diferente. Ahora, cada vez que sumes un 10% de peso de equipo, tu movimiento se ralentizará un poquito, aunque hay límites clave (<25%, <50% y <70%) en los que se penaliza un de forma extra. Así pues, la esquiva del personaje es más benevolente, sí, pero ahora incluso con armaduras muy ligeras te será difícil bajar del 25%.

4. Bendito sea el herrero

El sistema de mejoras de armas y armaduras de Dark Souls II también difiere de los dos juegos anteriores. Aquí es claramente más amable con el jugador y para mejorar armas imbuidas con poderes solo necesitas gastar una piedra especial una vez. Cuando vayas a mejorarla, seguirá usando el tipo de titanita que usaba antes. E incluso si decides cambiar el tipo de efecto del arma, las mejoras acumuladas se mantendrán.

5. ¿Tanque? Piénsatelo mejor

Algo que ha sorprendido a muchos de este juego es que los 'tanques' y el uso de escudos se ha penalizado bastante. No solo hay menos escudos que resten el 100% del daño recibido, sino también hay más enemigos con ataques que te rompen la defensa. Para colmo, recuperarse de ello es más lento, así que si eres de jugar como un tanque quizá quieras aprender a rodar...

6. No temas a los invasores

Lo más divertido de este juego es invadir y ser invadido, enfrentarse siempre a lo desconocido y, si fallas, pagar las consecuencias. Ahora hay muchas nuevas formas de competir y ayudar a los demás jugadores, así que trata de entenderlas todas. Úsalas siempre que puedas y sin miedo.

7. Fuerza o destreza y magias

Decidirse por una u otra clase de personaje puede ser muy complicado, aunque el juego te permite probarlas todas si te lo montas bien restableciendo estadísticas. Sea como fuere: acabarás haciendo un personaje mixto o puro o un personaje con fuerza o destreza y magia. Es una cuestión de probar y de maestría, así que tampoco te obsesiones demasiado, es posible pasarse el juego metiendo algo la pata con los hechizos y haciéndose un personaje que no destaca en demasiados puntos. Lo importante es divertirse, aunque si quieres mi consejo: destreza y milagros es una buen idea.

8. Los pactos son lo más

En serio, lo son. Permiten conseguir objetos exclusivos y competir bajo condiciones concretas contra otros enemigos. Tienes total libertad para pasar de uno a otro y un personaje peludo en Majula te ayuda a salir y entrar de ellos o a saber cuánto has mejorado. Pruébalos todos y decide con cuál estás más cómodo, pero si es tu primera partida NO jures el pacto de los La Compañía.

9. Juega sucio

Este es el mejor consejo que se puede dar en este juego: no hay ninguna táctica que sea tramposa ni injusta. Si existe una trampa que puedes aprovechar en tu favor, hazlo, porque el juego empleará otros fallos contra ti y porque cualquier jugador online lo conocerá y tratará de ponerlo en tu contra. La supervivencia y la ley del más fuerte son las dos únicas directrices que deben guiar tu espada en este juego. En Dark Souls, el fin justifica siempre los medios.

10. Cuando te lo acabes, sigue jugando, no seas bobo

Dark Souls incluía personajes más duros y que daban más almas en sus sucesivos Juego Nuevo +, pero Dark Souls II va mucho más allá. No solo dan más almas y son más difíciles, sino que hay enemigos totalmente nuevos, los jefes finales tienen nuevos patrones y ayudantes en la batalla y se pueden conseguir armas, armaduras y magias que no se pueden obtener de ninguna manera en la primera partida.