Qué le pedimos a Magic 2015 Duels of Planeswalker

    Magic 2015 Duels of Planeswalker se prepara para llegar a nuestros sistemas, el E3 mostró su potencial, pero todavía tiene mucho trabajo por conseguir convencernos y superar a Hearthstone. Aquí van cinco cosas que le pedimos a esta nueva edición del popular juego de cartas.

    Magic 2015, en su formato Planeswalker, está al caer, acudiendo a su cita veraniega. Pero este no es como los otros años en los que han conseguido seducir al amante del juego original tan solo haciendo acto de presencia. Ahora Hearthstone ha puesto el listón muy alto, más si pensamos en la gran ventaja que es concebir un juego directamente para consolas y PC. Magic no deja de ser una adaptación a este sistema.

    Por la situación en la que el popular juego de cartas se encuentra en su inminente llegada a nuestras plataformas favoritas (salvo a PS4 y PS3, esto aún está por ver) estas son las cinco cosas que le pedimos a la edición de este año para lograr convencernos.

    1. Mazos customizables, sin limitaciones

    Por fortuna, esto es algo que se ha confirmado que contendrá el videojuego. A nadie se le escapa la coincidiencia de que Hearthstone ya deje hacer esto, mejorar las decks y seguir jugando con comodidad y aspirando siempre a obtener un mejor juego con los nuevos cartones obtenidos. Falta comprobar como funcionará que te den un mazo y el ritmo de mejora de mazos, además de su relación con el dinero. Eso sí, limitado a la correspondiente edición del juego de cartas.

    2.Modos de juego a la altura

    Los campeonatos de Magic acumulan un buen número de modos de disfrutar de su juego, es quizás en este modo en el que más facilmente puede pasarle la mano por la cara a Hearthstone (en algo tendría que ser): modos a cuatro jugadores, rondas rápidas, juego solo con cartas comunes, torneos con jugadores que solo pueden contar con cartas aparecidas al azar, son solo uno de los ejemplos que esta iteración debería saber cosechar.

    3.Poder cambiar nuestras cartas y apostar

    Este es quizás el punto más complicado de llevar a cabo, hecha la ley, hecha la trampa. Permitir un sistema de intercambio permitiría la compraventa de cartones digitales, chanchullos y chinos jugando sin parar para obtener cartas y desestabilizar el propio juego.

    Pero seamos sinceros, lo más divertido de las tardes de Magic era ese momento en el que decidías cambiar de mazo, acudir al garito donde todo el mundo subastaba sus mejores cartas e intentar completar esa baraja que leías todos los días en la Urza. De conseguir implantar este sistema en Magic, se sumarían todo un puntazo con respecto al título de Blizzard

    4.Dejarse de tanto Planeswalker y ser más Magic

    Si algo ha hecho bien Hearthstone es brindarnos un interfaz fabuloso, ligero y divertido. El juego de cartas se libra de tanta parafernalia, épica y nombres de héroes rimbombantes envueltos en una trama tonta. Lo bueno de Magic eran los colegas, el suelo de patio y el juego. En definitiva: divertirse.

    Qué mejor modo de potenciar la creación de un mazo personalizado que hacer de cada partida, eso, una partida; no un duelo entre magos de los planos astrales, sino uno entre dos colegas. Esa es la buena inmersión

    5. Permitir tácticas elaboradas en el juego

    La edición de 2014 tenía un serio problema: muchos de los combos y de los aceleradores de maná estaban capados, restándole a Magic el potencial de las elaboradas tácticas que permite. Si bien es cierto que esto facilita la curva de aprendizaje del juego, complicado de dominar al principio, frustra a aquellos que vamos a este título con las ganas de exprimir, online, todo el potencial del trabajo de Wizards of the Coast

    Estas son las cinco cosas que le pido a Magic, afortunadamente, la más importante de ellas es el buque insignia de esta entrega, una que por fin nos deja elaborar nuestros mazos, personalizarlos y mejorar verdaderamente. Este verano, preparad los cartones, planeswalker

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