Mejores opciones de diálogo en The Outer Worlds

La gracia de The Outer Worlds y lo que hace grande a Obsidian está en su roleo y sus diálogos. Mentir, amenazar, alardear de conocimientos, convencer y persuadir son sólo algunas opciones. Y sí, se mantiene eso que hizo brillar a Fallout: New Vegas: ser un completo imbécil. Te contamos cuáles son las mejores opciones de diálogo en The Outer Worlds.

Mejores opciones de diálogo en The Outer Worlds - Sé tú mismo

El mejor consejo que podemos darte para las conversaciones de The Outer World es que seas tú mismo... a no ser que puedas ser Batman. En ese caso, se Batman. Con esto queremos decir que no tengas miedo a rolear y establecer tu propio personaje no sólo en ropa y talentos, sino también en lo que a actitud se refiere.

Sigue el carácter de tu personaje y trata de crear tu leyenda mientras dialogas con corporaciones, rebeldes, comerciantes y piratas espaciales. No tengas miedo a actuar como creas conveniente y miente, persuade o amenaza todo lo que veas necesario. Así disfrutarás de las mejores líneas de este magnífico juego.

Mejores opciones de diálogo en The Outer Worlds - Estupidez

No obstante, si lo que quieres es reírte a carcajadas y disfrutar del avispado ingenio de la gente de Obsidian, lo mejor es que seas idiota. Ojo, no te decimos que te comportes como un idiota, sino que cuando crees a un personaje bajes la puntuación de Inteligencia de normal a inferior a la media.

No te preocupes porque puedes compensar la baja puntuación usando el siguiente truco. ¿Y por qué ser un idiota? Pues porque esto desbloquea las que sin duda son las mejores opciones de diálogo de todo el juego. Estas opciones aparecerán durante las conversaciones mientras hablas con otros personajes incluyendo argumentos absurdos, circunloquios y genialidades que sin duda te alegrarán la partida.

Mejores opciones de diálogo en The Outer Worlds - Date el gusto

Si quieres disfrutar de las mejores opciones de diálogo de The Outer Worlds, las más hilarantes y divertidas, lo mejor es que sigas este consejo: date el gusto. No dejes de responder algo que te llame la atención y no tengas miedo a ensarzarte en conversaciones que rocen el absurdo. Son, sin duda, lo mejor del juego.