Análisis de Banishers: Ghosts of New Eden - El sucesor espiritual de Vampyr
Los padres de Life is Strange sorprenden con este nuevo ARPG de fantasmas. ¿Ha salido bueno? Te lo contamos en nuestro Análisis de Banishers: Ghosts of New Eden. El sucesor espiritual de Vampyr
Tras su interesante trabajo en Vampyr, Don't Nod vuelve a la carga con un ARPG de espectros y espíritus que oculta una potente historia de amor. ¿Merece la pena esta nueva obra? ¿Ha vuelto Don't Nod a dar en el clavo? Te contamos todo en nuestro Análisis de Banishers: Ghosts of New Eden.
El sucesor espiritual de Vampyr
A estas alturas del cuento, hablar de Don't Nod es hablar de una compañía muy comprometida con hacer juegos de alto componente emocional. Ya sea el brillante Life is Strange y sus secuelas, Tell me Why y su apuesta por la inclusión o su último lanzamiento, Jusant, y cómo juega con sus mecánicas para envolvernos en la historia. Si algo ha demostrado Don't Nod a lo largo de su carrera es que, con mayor o menor acierto, sus juegos introducen siempre ese componente narrativo emotivo que hace que sean mucho más que simples lanzamientos.
Pero Don't Nod es mucho más que aventuras gráficas y trepar. Ya en sus inicios intentaron dar el golpe con un juego de acción, Remember Me, que no acabó de funcionar tan bien como esperaban. Tras conseguir el éxito con el formato de aventura gráfica gracias a la saga Life is Strange, no sería hasta Vampyr, en 2018, que la compañía se haría con el favor del público con un potente ARPG. Un título que se convertía por méritos propios en el mejor juego de vampiros de la década en un momento, eso sí, en el que los juegos de temática chupasangre brillaban por su ausencia. No obstante, con Vampyr Don't Nod salía de su zona de confort y saldaban el experimento con un título de ambientación sobresaliente, guion brillante y mecánicas varias que sabían mantener el ritmo.
Análisis de Banishers: Ghosts of New Eden. Una historia de fantasmas
Con el ojo puesto en Vampyr y todo el equipo dispuesto a subir el listón, Banishers: Ghosts of New Eden nos cuenta una historia de miedo ambientada en la Nueva Inglaterra de 1690. New Eden, una localidad ficticia localizada en Massachusetts, será el escenario central de este cuento de fantasmas protagonizado por los odios y los miedos de una comunidad puritana de colonos típica del siglo XVII.
New Eden y sus alrededores se convierten en escenario único e ideal con un asentamiento principal que no renuncia a densos bosques, hermosas praderas, un fuerte y, como no podía ser de otra forma, ciénagas plagadas de fantasmas que rodean la cabaña de un importante personaje en la historia. Un mundo que se irá abriendo ante los protagonistas según avanzamos en la aventura y que contiene componentes de metroidvania que nos invitarán a regresar a zonas ya pasadas para acceder a zonas bloqueadas en busca de recursos, armas y recompensas.
Pero ¿Cómo se juega a Banishers: Ghosts of New Eden?
Banishers es un ARPG en tercera persona de mundo semi abierto en el que avanzaremos de forma bastante lineal por sus localizaciones, aunque siempre podemos volver atrás o elegir el próximo escenario a explorar una vez lleguemos a cierto punto. Manejamos a ambos protagonistas, Red, un desterrador armado con un rifle, una espada y una antorcha; y Antea, una presencia con poderes especiales que puede realizar devastadores ataques desde su plano espectral.
El juego se estructura de forma parecida a la de Vampyr, pero con algunas diferencias notables. Por un lado tenemos la parte más RPG que, siguiendo el estilo de la compañía, nos invitará a hablar con los personajes que pueblan las zonas habitadas. Podremos explorar libremente los escenarios, interactuar con los personajes e investigar los distintos casos de presencias para descubrir los secretos más oscuros de la comunidad, liberar a los personajes de los fantasmas que los atormentan o condenarlos por sus pecados. Fuera de los asentamientos, en la zona más 'Action' de este ARPG, el combate se convierte en el plato fuerte de la experiencia junto a la exploración y la necesidad de recoger distintos recursos que nos ayuden a mejorar el equipo de Red.
Combate en Banishers: Ghosts of New Eden
El combate funciona, pero comete los mismos errores que Vampyr con una experiencia que dista mucho de sentirse fluida, aunque ha sabido mejorar con el paso de los años. Red puede realizar distintos combos con sus armas de mano, atacar a distancia con el fusil, y pedir ayuda a Antea, ya sea con golpes introducidos a final de cada combo o pasando directamente a controlar a su amada en combate. Esquivas y bloqueos se unen a la posibilidad de realizar distintos parrys para crear un todo que funciona, pero habría funcionado mejor con un poco más de fluidez.
El combate contra enemigos corrientes -espectros de poca monta y animales poseídos que requerirán el trabajo en equipo para ser derrotados- se une a zonas malditas en las que tendremos que enfrentarnos a enemigos más poderosos, élites y azotes que son, al final, los jefes de zona y los enemigos que nos harán sacar todo el jugo al combate.
Personaliza tu experiencia
Destaca el interés de Don't Nod por ofrecer varias posibilidades de personalización al jugador con tres grandes rangos que abarcan el ataque cuerpo a cuerpo basado en fuerza, a distancia en destreza y de tipo espectral mediante la potenciación de la sabiduría. Según avanzamos iremos consiguiendo distintas piezas de equipo: prendas, poción, anillo, colgante e insignia, que nos permitirá jugar con estos valores para crear al personaje.
En cuanto a los poderes, habilidades y combos, los árboles de habilidad aparecen alrededor de cada nuevo poder que consigamos desbloquear con Antea. Estos nuevos poderes desbloquean distintas casillas en las que podremos invertir puntos espirituales o puntos de habilidad de Red para conseguir distintos tipos de ventajas y potenciadores, desbloquear más pociones y mejorar daño y defensa. Por si esto fuera poco, los nuevos poderes de la desterradora podrán usarse en combate para dañar o atrapar a los enemigos, así como durante la exploración para abrir nuevos caminos, viajar a través de portales, destruir hiedra que bloquee el paso y mucho más.
La importancia del ritual
Una de las cosas que más me ha gustado de Banishers: Ghosts of New Eden es el mimo y el cuidado que Don't Nod ha puesto a la hora de ambientar su juego, tanto en el contexto socio-cultural como en el marco histórico y toda la literatura y parafernalia espiritista de la época. La Summa theologiae de santo Tomás de Aquino se da la mano con los textos ocultistas de Cornelius Agrippa, una suerte de Leonardo da Vinci alemán que tuvo menos suerte que nuestro renacentista amigo. La presencia de textos reales, sumada a las bases del posterior interés en el espiritismo de la alta sociedad inglesa que vemos en la obra de autores como Percy B. Shelley, Sir Arthur Conan Doyle, Emily Dickinson y, por supuesto William Hope Hodgson.
Junto a los manuscritos, Banishers: Ghosts of New Eden hace gala de una intensiva investigación a la hora de plantear los distintos rituales que usaremos en el juego. Invocar distintos tipos de presencia, ascender o condenar a muertos y vivos, viajar por el plano del vacío o desvincular presencias oscuras serán distintos rituales que nos ayudarán a avanzar en la historia y que a los lectores de Hodgson y sus aventuras de Thomas Carnacki, el cazafantasmas, les resultarán más que familiares. Una asociación más que obvia y que incluye esos fuertes toques lovecraftianos de los viajes por el vacío, ya que el propio Lovecraft reconoció la fuerte influencia de Hodgson en su obra. Como suele decirse, al final todo queda en casa.
Banishers: Ghosts of New Eden en lo técnico
Jugado en Xbox Series X con un código cedido por cortesía de Plaion, Banishers funciona de forma correcta sin realizar grandes alardes pero manteniendo en todo momento un rendimiento sólido y con un aspecto en pantalla que brilla gracias al diseño artístico de personajes, enemigos y localizaciones, especialmente en momentos de lluvia o zonas como los pantanos y la pradera. Las voces, bien interpretadas en inglés y con subtítulos en castellano con algunos pequeños fallos de traducción, sirven para ambientar una historia en el que los diálogos son parte de lo más disfrutable de la experiencia. Ya sea hablando con los miembros de la comunidad o disfrutando las conversaciones entre Red y Antea, Banishers juega con lo oscuro, lo tétrico, lo doloroso, lo cómico y lo más oscuro de la naturaleza humana para conseguir que cada nuevo paso en la aventura esté plagado de interés.
En lo sonoro, nos encontramos con efectos muy logrados especialmente en lo que se relaciona con el mundo espectral. Destacan melodías sobrias, que recuerdan a esos toques de chelo de Vampyr, con momentos de silencio absoluto en los que son los sonidos de la naturaleza o el de los fantasmas los que nos acompañan en los pasos más lóbregos de la aventura.
¿Merece la pena?
Banishers: Ghosts of New Eden nos ofrece una aventura en la que lo que más brilla es lo que mejor sabe hacer Don't Nod: las investigaciones de presencias, los diálogos y la exploración de cada nuevo asentamiento y la psique de los miembros de su comunidad. Los combates no dejan de ser un añadido con algunos momentos brillantes que, lamentablemente, no son la norma, pero la historia tiene alicientes de sobra para llamar la atención del jugador. El mimo por los detalles, la investigación del momento y el lugar y el cuidado por ofrecer una historia de fantasmas con pilares sólidos terminan por crear un juego muy disfrutable a caballo entre un ARPG copn historia profunda y un capítulo de Entre Fantasmas que nos invita a decidir, cómo no, el destino de los protagonistas y de la comunidad que les rodea eligiendo la salvación o la condena a costa de su final.
