Análisis de Forza Motorsport - Turn 10 truca el motor y mejora su saga
Turn 10 truca el motor de su saga más prolífica para ofrecer un clásico renovado con muchas mejoras por comentar. Te lo contamos en nuestro análisis de Forza Motorsport,
Seis años han pasado desde la última entrega. Seis años en los que la compañía ha puesto todo de su parte para lanzar al mercado un nuevo episodio que sirve de reboot de la franquicia en todos sus aspectos. Te lo contamos en nuestro Análisis de Forza Motorsport: Turn 10 truca el motor y mejora su saga con un resultado espectacular.
Análisis de Forza Motorsport: esto no es un Horizons
Forza regresa a su faceta más competitiva y tras un brillante Horizon 5 de la mano de Playground, los chicos de Turn 10 vuelven a dar un golpe en la mesa con su propuesta de competición deportiva. Si Forza Horizon es disfrute, exploración y arcade con partes de conducción libre, Forza Motorsport es pura simulación deportiva, competición y habilidad afinada hasta el milímetro para marcar la diferencia, aunque sea en milésimas de segundo, en la línea de meta.
Si eres veterano de la casa sin duda conocerás las diferencias entre ambas marcas, pero si llegaste hace poco y sólo conoces Forza Horizon, olvida todo lo que sabes. La buena mano de Playground para crear esas experiencias fantásticas en México, Reino Unido cede su lugar junto a toda la locura LEGO y Hotwheels a la más pura competición. Turn 10 es rápida, es certera, apura el mimo por los detalles en las configuraciones de motor y se centra en ofrecer un simulador de conducción deportiva plagado de vehículos, pistas, trazados, cambios climáticos, comportamiento en carretera y, por encima de todo, carreras de todo tipo y para todo tipo de jugadores.
Mucho nuevo de lo que hablar
Confieso que soy fan de Horizon y ese placer de conducir por conducir, pero seis años son muchos años y esperaba el regreso de Motorpost como agua de mayo. Lo primero que llama la atención, como no podía ser menos, es el aspecto visual y el rendimiento en carrera, tanto en la tasa de FPS como en su conducción. Forza Motorsport sale en exclusiva para PC y Xbox de última generación, y esto se nota con un resultado en pantalla sencillamente brillante. La iluminación, las texturas, los efectos climáticos, los detalles de los coches, el asfalto y los entornos... Todo luce de escándalo en la versión probada en Xbox Series X en todos los modos gráficos. Cabe destacar que podemos elegir un modo rendimiento a 60 FPS que no renuncia al 4K, aunque si queremos aprovechar el trazado de rayos, la tasa de animación baja a 30FPS en el modo calidad. Un modo que os aconsejo probar si queréis ver cómo funciona el famoso BlueTracing no sólo en los vehículos, sino también en todo el entorno de la carrera.
En cuanto a la conducción, Turn 10 cumple su promesa y reescribe la saga desde cero creando un juego totalmente nuevo- Todos los aciertos anteriores se condensan en una nueva forma de plantear la conducción que mejora aún más la sensación al volante de Motorsport 7. La conducción en el nuevo Forza Mortorsport es tan grata como personalizable, con una gran cantidad de opciones a la hora de configurar ayudas y sistemas, tunear todos los aspectos de nuestro coche y plantear las estrategias en carrera. Por un lado, las opciones generales te permitirán activar ayudas de frenado, giro, marchas automáticas, conducción... regulando el medidor entre simulador y arcade para que tanto los recién llegados como los veteranos encuentren en Motorsport el juego deseado. Por otro, las opciones de personalizar tu coche antes de cada carrera van más allá del motor, los neumáticos y el peso llegando a detalles como permitir que decidas cuánto combustible y programes las paradas en boxes para repostar a la vez que cambias neumáticos y echas un ojo a los frenos en las competiciones más exigentes.
Una personalización que incluye una gran cantidad de vistas y cámaras entre las que. una vez más, me he decantado por la vista de cabina. La sensación de estar realmente al volante, incluso jugando con mando, es sorprendente. Los volantes, los detalles del salpicadero, los medidores y la rotación del volante y las animaciones de las manos son un cambio refrescante respecto al salpicadero sosete de mi C4 Cactus, dando la sensación más realista a una competición que pretende ser tan real como la vida misma.
Progresión por niveles
Como te comentábamos, Forza Motorposrt no es Forza Horizon, y hacía falta una forma distinta de progresión que no se apoyara en la exploración y los coleccionables. Turn 10 ha instaurado para tal fin una medida bastante curiosa que parece a caballo entre el arcade y la simulación competitiva: La afinidad con tu vehículo. Tomando de base el sistema de puntos de Horizon, nuestra conducción nos dará puntos con los que podremos subir de nivel nuestra afinidad -o familiaridad- con un vehículo. Cuánto más subamos de nivel más piezas y mejoras podremos desbloquear para este coche en concreto en el taller.
Al conducir un coche determinado subiremos de nivel este coche, pero no el resto. Esto, traducido a un juego con una oferta inicial que incluye un catálogo de 500 vehículos -y que irá incrementándose con el tiempo- tiene sus pros y sus contras. En la parte negativa, lo más normal es que termines utilizando un único vehículo para las competiciones importantes, aprovechando su nivel. En la parte positiva, es muy grato dejar tu coche principal en el garaje y empezar de cero con un nuevo vehículo para afinar tus habilidades y volver a la carga en una nueva tanda de competiciones y carreras.
Competiciones y carreras
Forza Motorsport reescribe su tradicional modo carrera con un modo principal en el que iremos yendo de una a otra carrera con sus paradas en el garaje o el taller y sus ajustes de última hora antes de cada competición para adaptarnos a las necesidades del trazado, el clima y el estado del asfalto. No faltan los modos libre, en que podremos aprovechar los entrenamientos para subir de nivel nuestro vehículo, y un multijugador que nos permitirá enfrentarnos a nuestros amigos u otros jugadores en varios tipos de competiciones y carreras. Por último, Motorsport incluye una serie de eventos que podemos aprovechar para subir de nivel nuestro coche y sacamos punta a nuestras habilidades al volante.
Destaca la renovación del sistema de penalizaciones dedicado a los conductores más guarretes y más acostumbrados al estilo destruction derby de Horizon. Recortar saltándonos la chicana, colisionar con otros jugadores o llevar a cabo maniobras peligrosas conllevarán un castigo en forma de segundos que puede costarnos la clasificación. Afortunadamente esta medida no se aplica sólo a todos los jugadores, sino también a las IA, que vienen cargaditas y bastante sucias y agresivas, sobre todo en las curvas más peligrosas. Prepárate para ser embestido en ocasiones, sobre todo en los modos de dificultad más altos.
Turn 10 truca el motor y mejora su saga
El nuevo Forza Motorsport llega a PC y Xbox Series X/S disponible en tiendas, plataformas digitales y el catálogo de lanzamientos día uno de Game Pass, y lo hace cumpliendo todas las promesas de Turn 10 y Microsoft Game Studios. Estamos ante el que sin duda es el mejor capítulo de la saga, un reboot que ofrece una conducción más satisfactoria, un aspecto visual impecable y un rendimiento a prueba de bombas. A esto se une una gran cantidad de opciones de accesibilidad no sólo enfocadas al jugador recién llegado, sino también a personas con problemas sensoriales y motrices, lo que lo convierte en el simulador de conducción deportiva de Microsoft más accesible del mercado.
En la parte negativa se echan falta algunos modos de juego extra que irán llegando más adelante, así como un doblaje en castellano, aunque siempre podemos hacer el truqui y disfrutar de las voces en español de México. Quitando esto, Forza Motorsport es todo lo que debía ser: Coches potentes, un montón de trazados, conducción grata y un montón de excusas para salir al asfalto y continuar nuestra carrera, echar un pique con los amigos, conocer a nuevos jugadores y aprovechar para olvidar los problemas del día a día mientras dejamos que la velocidad nos envuelva.
